Top 5 – Phish-o-ween

Hoy se cumple un mes del ya clásico set de Kasvot Växt que Phish se sacaron de la manga para su show de Halloween de este año, inventándose un grupo ficticio de disco-prog escandinavo de los setenta, componiendo un disco entero a su estilo y extendiendo un bulo por la red para hacer creer que estaban versionando a una banda real.

En su día ya dimos buena cuenta de todos los detalles de tan imprevisible noche y hoy, coincidiendo con el final de noviembre, el que quizá sea el mes Phish por excelencia del año (evidencia nº1: esta epopeya de 57 minutos a partir de «Runaway Jim» que se sacaron del sombrero hace exactamente 21 años, el 30 de noviembre de 1997, en el Worcester Center), echamos la vista atrás para recordar 5 de los mejores conciertos de Halloween con los que los cuatro fantásticos de Vermont han dado inicio al penúltimo mes del año «disfrazándose» de algunos de sus ídolos musicales.

Come waste your time with me…

Bootleg: The Rolling Stones – Ciudad Deportiva de La Habana, Cuba, 25/3/2016

El pasado 25 de marzo los Rolling Stones cerraron su gira sudamericana Olé Tour actuando ante más de 300.000 personas en un histórico concierto gratuito en La Habana.

Ronnie Wood – 40 años siendo «el nuevo»

Parece mentira pero en estas fechas se cumplen cuatro décadas de la entrada de Ronnie Wood en los Rolling Stones. Woody ya lleva siendo un Stone más del triple de tiempo del que la banda llevaba en activo cuando se incorporó al grupo y, sin embargo, aunque pasen otros 40 años siempre será el «chico nuevo».

Top 5 – The Rolling Stones

Este verano Keith Richards ha estado diciendo bastantes tonterías para promocionar su nuevo disco en solitario, Crosseyed Heart. Hace un mes el guitarrista declaró que Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band «es una basura» y poco después volvió a arremeter contra los Beatles asegurando que «como banda, no estaban sincronizados entre ellos». Los de Liverpool no han sido los únicos en recibir las críticas de Richards, que también ha explicado que Black Sabbath y Metallica le parecen «un gran chiste» y que los Grateful Dead eran una «mierda aburrida». Después de haber visto a los Rolling Stones en sus últimas dos giras resulta cuanto menos curioso que el señor Richards apunte con su dedo a otras bandas acusándolas de no sonar sincronizadas y ser un chiste, y no deja de resultarme triste que a estas alturas de la película el guitarrista necesite insultar a otros artistas para darse publicidad, pero el caso es que todas estas sandeces me han hecho recordar la época en que Mick Jagger y él tenían un grupo de rock and roll juntos. Ahí van cinco temas poco típicos de los Rolling Stones clásicos que ponen de manifiesto lo bueno que era ese grupo.

The Flamin’ Groovies – Teatro Barceló, Madrid, 11/6/2015

Érase una vez, en el San Francisco de la segunda mitad de los sesenta, una banda llamada The Flamin’ Groovies que, al contrario que el resto de sus paisanos, inmersos en el sonido psicodélico inspirado por la experimentación con LSD, gustaban de ponerse hasta arriba de anfetaminas y practicar furioso rhythm and blues acelerado. En un paisaje marcado por las largas jams instrumentales, sus versiones de Little Richard y sus riffs de guitarra extraídos del manual de estilo de Chuck Berry irremediablemente les convirtieron en los bichos raros de la escena, pero los Groovies encontraron su lugar durante un viaje por el medio oeste en 1969.

The Rolling Stones – Get Your Leeds Lungs Out (1971)

Hace 44 años los Rolling Stones recalaron en la Universidad de Leeds para la penúltima parada de su UK Tour 1971, una pequeña gira de nueve fechas que supuso el regreso de la banda a los escenarios ingleses por primera vez desde 1966 (salvando el homenaje a Brian Jones en el londinense Hyde Park el 5 de julio de 1969). En el primer concierto de la gira, el 4 de marzo en el Newcastle City Hall, Mick Jagger había anunciado que en primavera los Stones abandonarían el Reino Unido por motivos fiscales para establecer residencia en el sur de Francia, por lo que el tour se convirtió en una suerte de despedida de su país, al que no sabían cuándo podrían regresar, y a menudo se le denomina el Goodbye Britain Tour.