La semana pasada hablábamos de la controversia que se ha suscitado en torno a la elección de Trey Anastasio de Phish como guitarrista para la reunión de los Grateful Dead y explicábamos que los caminos de Phish y los Dead se han cruzado en contadas ocasiones. Esta es una de esas ocasiones.
Pese a que Phil Lesh ya había utilizado el nombre Phil Lesh & Friends para un concierto acústico en 1994 junto a Jerry García y Bob Weir, esta residencia de tres noches en el teatro Warfield de San Francisco en abril de 1999 supuso la auténtica puesta de largo de la carrera en solitario del bajista. García había muerto en agosto de 1995, obligando a los Grateful Dead a poner fin a 30 intensos años en la carretera, y no fue hasta tres años después, en 1998, que Phil, Bob Weir y Mickey Hart volvieron a los escenarios bajo el seudónimo The Other Ones. Esta gira junto a sus dos excompañeros debió reavivar la llama en el bajista, que a principios de 1999 empezó a reunir a músicos para una banda que se convertiría en la primera gran formación de Phil Lesh & Friends, un colectivo en cambio constante que, 16 años después, sigue siendo su vehículo principal para explorar los mil y un confines de la música de los Dead. Para esta primera aventura alejado del resto de miembros de su banda madre, Phil contó con dos músicos que habían participado en la gira de The Other Ones: el batería John Molo y el guitarrista Steve Kimock, y con dos miembros de la banda que había heredado el trono de los Dead como reyes indiscutibles de la escena jam band: Trey Anastasio y Page McConnell de Phish. Para poner la guinda al pastel, las dos últimas noches también contaron con la participación de la que fuera corista de los Dead en los setenta: Donna Jean Godchaux.
A día de hoy, los conciertos del Warfield siguen considerándose uno de los puntos álgidos de la carrera de Phil Lesh & Friends. El bajista aprovechó la oportunidad para recuperar viejos clásicos de la primera época de los Grateful Dead como «Alligator», «Cosmic Charlie» y «Mountains Of The Moon» así como para soreprender al público con inesperadas versiones que fueron desde el «Wish You Were Here» de Pink Floyd hasta «My Favourite Things» de John Coltrane, y la compenetración entre los miembros del quinteto dio lugar a estratosféricas jams que evocaron el espíritu de los Dead más inventivos de mediados de los setenta. Además, estos tres conciertos siguen suponiendo la única oportunidad para escuchar a Phil tocar temas de Phish como «Down with Disease», «Wolfman’s Brother» o «Chalk Dust Torture».
Las tres noches son igualmente espectaculares pero he optado por compartir el show del 16 aunque sólo sea por el impresionante «Help on the Way > Slipknot! > Franklin’s Tower» inicial, en el que Lesh, Molo y McConnell proporcionan una movediza base rítmica sobre la cual Kimock y Anastasio establecen un impagable diálogo lisérgico. El segundo set también es pura magia, arrancando con una animada «Bertha» cuyo final se funde con los primeros acordes del «Prince Caspian» de Phish, que a su vez acaba disolviéndose en un jovial «St. Stephen» que atraviesa una inspirada jam sobre la melodía de «The Eleven» antes de recaer en la majestuosa «Unbroken Chain». Tras la inesperada reaparición de la mencionada «Mountains of the Moon», el set llega a su fin con un brillante «Scarlet Begonias > Fire on the Mountain» y Phil y sus amigos despiden la noche con un sentido «Ripple» coreado por todos y cada uno de los presentes en el Warfield.
Una prueba irrefutable para convencer a cualquier escéptico de que Trey Anastasio está más que capacitado para llevar el repertorio Dead a nuevas cotas este verano en Chicago. Si os quedáis con ganas de más podéis descargar los otros dos conciertos a través del genial blog Midnight Cafe Bootlegs.
Disfrutad.
Phil Lesh y Trey Anastasio sobre el escenario del Warfield